sábado, 19 de marzo de 2016

Lucas sale un rato de la incubadora

Hoy cumplió 5 dias de nacido. Le quitaron la maquina CPAP ayer y se la cambiaron por una cánula que le sopla oxígeno en la nariz con mas suavidad. Hoy le quitaron todo eso y me dejaron darle de mamar directamente y acostarlo contra mi pecho, dos veces. El propósito era ver si podia coordinar su respiración con el pecho en la boca, ademas de darle oportunidad a que sus músculos de mamar se fortalezcan. Lo hizo bien y sin agitarse.
Me sorprendió lo bien que se prendió al pecho y mamó como si fuera un experto. Cuando EJ era recién nacido, no me fue tan fácil conseguir que lactara así de eficazmente, pero en gran parte seguro se debía a que yo no sabía como darle.


Después que se fatigó de mamar, una enfermera le dio el resto de su dosis con una jeringa. Hasta ayer había estado recibiendo leche por una sondita muy finita para evitar bloquear su respiración. Las enfermeras comentan con admiración (1) que toma bastante leche, y (2) que la madre tiene un abastecimiento bastante generoso de leche. Estoy muy contenta porque los doctores y las enfermeras han sido muy comprensivos y competentes. Les agradezco tanto eso.

En casa ha habido bastante caos, porque diferentes técnicos han estado entrando y saliendo para instalar cable, colgar cortinas, sellar el granito de la cocina, y Ernesto ha estado recibiéndolos, y supervisándolos, descubriendo mas deficiencias en la forma en que han construido nuestro departamento, llevándome y trayéndome a ver a Lucas, entreteniendo a EJ, etc. Me recuerda a Taz el pobre. Mis suegros han pasado bastante tiempo aquí ayudándonos con EJ, la comida, las instalaciones, etc. Mi cuñada y sobrinas han venido un par de veces y jugado mucho con EJ. Eso ha sido una distracción valiosísima para mi chiquito, que aguantó la ausencia de su mama con mucha serenidad.

EJ se conmovió hasta las lágrimas cuando escuchó el Lunes que su hermanito ya había nacido. Desde entonces pregunta a cada rato que cuándo va a venir. No me aguanto porque llegue el momento en que lo conozca.

Veo a Lucas y me recuerda bastante a EJ cuando estaba recién nacido. Este ha sido un día maravilloso, lleno de alivio, amor, ternura, cansancio y agradecimiento por las tiernas misericordias de nuestro Padre en el cielo. Tener a Lucas en mis brazos, ver sus ojos mirándome, y sobre todo, verlo respirando sin ayuda fueron gozos indescriptibles.

Mañana regresaré para que Lucas continúe practicando.